La provocacion de un cineasta israeli desata la violencia.

Los Ángeles.- Los disturbios antiestadunidenses que se han generado en Egipto y Libia, y que han ocasionado la muerte de un embajador norteamericano y tres funcionarios más, fueron desatados por una película que denigra la figura del profeta Mahoma. El responsable es el cineasta israelí Sam Bacile, autor de la cinta Innocence of Muslims (Inocencia de los Musulmanes), que retrata al profeta como un tonto, un filántropo, un ídolo religioso falso y teniendo sexo con una mujer. Bacile, quien se encuentra escondido ante el temor de represalias, mantuvo su postura desafiante al catalogar al Islam como un cáncer, en una entrevista telefónica luego de la ola de protestas. La cinta, de dos horas de duración, tuvo un costo de 5 millones de dólares y fue financiada por más de 100 donantes judíos, según el autor. Pese a que sólo ha sido exhibida en una ocasión en Hollywood, California, y con escaso público, según el propio Bacile, la película se filtró en YouTube y fue traducida al árabe, razón por la que se conoció en la comunidad islámica. Respecto a los ataques que se han registrado contra las sedes diplomáticas estadunidenses en Egipto y Libia, Bacile, quien reside en California y se autodefine como un judío israelí, lamentó los hechos pero responsabilizó a los sistemas de seguridad. “Estados Unidos debería hacer algo para solucionarlo”, declaró.